Una bomba en Alepo (Siria) destrozó los sueños de Ani y lesionó de por vida a su hija, pero tu apoyo la ayudó a seguir adelante.

En medio de la guerra siria, la explosión de un mortero destrozó por completo la casa de su familia y dañó de por vida a su niña de tan solo 7 meses.

Un Centro de Esperanza de Puertas Abiertas la acompañó en el dolor, y levantó oraciones por su hija y apoyos para que pudieran recomponerse económicamente.

A pesar de vivir en uno de los países donde más se marginan a los cristianos y a las mujeres, Ani está decidida a mantener su fe y a su familia. 

Cristianas perseguidas como Ani necesitan tus oraciones y tus apoyos para saber que importan. 

Con 55 € podríamos ayudar a una mujer perseguida a poner en marcha un pequeño negocio que le dé seguridad económica. 

Por favor, vela por nuestras hermanas perseguidas para que conozcan su valor en Cristo y puedan desarrollar el potencial que Dios les ha dado.

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