Hay 73,2 millones de cristianos en India. Esto es solo alrededor del 5 % de la población de más de 1441 millones de personas.
En la India, los extremistas hindúes consideran a todos los cristianos como forasteros y pretenden limpiar la nación del islam y del cristianismo, a menudo con gran violencia. Esta hostilidad suele estar impulsada por el hindutva, una creencia nacionalista hindú que algunos extremistas defienden: los indios deben ser hindúes y no se tolera ninguna otra fe. Esta mentalidad ha dado lugar a violentos ataques en todo el país y a la impunidad de quienes perpetran esta violencia, especialmente en lugares donde las autoridades son también hinduistas radicales. En esos lugares, los cristianos que asisten a las iglesias domésticas corren el riesgo de ser atacados por turbas extremistas que atacan durante las reuniones de culto.
Además, doce estados han aprobado leyes anticonversión que amenazan la libertad religiosa de los creyentes.
El mundo observó con aliento contenido cómo se celebraban las elecciones nacionales de India a mediados de 2024. Una vez más, Narendra Modi fue nombrado primer ministro, pero en esta ocasión, el partido nacionalista Bharatiya Janata Party (BJP), que había favorecido el deterioro de los derechos de las minorías religiosas, no obtuvo la mayoría absoluta. Por el contrario, el primer ministro Modi se vio obligado a formar una coalición con otros partidos políticos, incluidos algunos que defienden firmemente la libertad religiosa.
A pesar de las alentadoras noticias de las elecciones nacionales, la violencia contra las minorías religiosas ha continuado, incluida la ejercida contra los cristianos en el estado de Manipur, escenario de un conflicto etno- religioso masivo ocurrido en 2023. Además, las próximas elecciones estatales podrían restringir los derechos de las minorías religiosas si los partidos nacionalistas hindúes llegan a controlar los poderes legislativos.
Cada vez son más los Estados que adoptan las leyes anticonversión, creando un entorno en el que cualquier cristiano que comparta su fe puede ser acusado de delito, intimidado, acosado e incluso ser objeto de violencia. De forma conjunta, el estado septentrional de Uttar Pradesh endureció su ya existente ley anticonversión, añadiendo la cadena perpetua como posible condena.
«Los líderes religiosos cristianos del Estado de Uttar Pradesh, en el Norte de la India, prevén tiempos terribles, ya que las nuevas enmiendas acelerarán e intensificarán la persecución de la comunidad cristiana. Los cristianos de primera generación sentirán el efecto inmediato, ya que serán intensamente perseguidos, y las iglesias domésticas y sus pastores serán considerados «antinacionales»
—Abhay Kumar
Los conversos del hinduismo al cristianismo son quienes más sufren la persecución. Pueden recibir presiones por parte de su familia, la comunidad y los extremistas para que regresen al hinduismo mediante campañas de reconversión como Ghar Wapsi («regreso a casa»). Los conversos suelen sufrir agresiones físicas y, en algunos casos, ser víctimas de asesinato. Los líderes de las iglesias domésticas también son objetivo de los extremistas y de la violencia colectiva. La persecución contra los cristianos tribales, catalogados como Tribus Registradas, ha aumentado. Los extremistas hindúes han iniciado la Campaña de Exclusión contra los conversos tribales con el fin de despojarlos de sus derechos y privilegios.
En toda la India, las mujeres cristianas, especialmente las conversas del hinduismo sufren malos tratos y son objeto de persecución. Son víctimas de vejaciones, violaciones y acoso sexual; las hijas, hermanas y esposas de los líderes religiosos cristianos son las más vulnerables. La vergüenza es una fuerza poderosa en la sociedad india y las agresiones sexuales se consideran una mancha en el honor familiar. En las zonas tribales, las jóvenes cristianas corren un alto riesgo de violencia sexual. Las mujeres cristianas casadas también son avergonzadas por no llevar los símbolos hindúes del matrimonio y se las tacha de inmorales por ello.
Las mujeres conversas también son más vulnerables a la violencia doméstica. Se enfrentan al arresto domiciliario, al secuestro, al matrimonio forzoso y al divorcio, a la pérdida de la custodia de sus hijos y a la violencia física, que puede incluir ataques con ácido, palizas e incluso la muerte.
En el conflictivo Estado indio de Manipur, las mujeres cristianas sufren graves persecuciones, como secuestros, violaciones, torturas y asesinatos. Desde mayo de 2023, este conflicto étnico sigue teniendo un fuerte trasfondo de intolerancia religiosa, lo que hace que las mujeres cristianas sean especialmente vulnerables.
Los hombres cristianos de la India se enfrentan a diversas formas de violencia y persecución, especialmente cuando practican abiertamente su fe o hablan de ella. A menudo son objetivo de los extremistas por su papel como cabeza de familia o líderes en la Iglesia. Pueden sufrir brutales palizas, violencia colectiva y tortura emocional, como ser obligados a presenciar agresiones a sus familiares.
Los líderes eclesiásticos (muchos son hombres) son especialmente vulnerables, y los pastores corren graves riesgos. Sufren abusos, torturas y humillaciones, y a menudo son objetivo de los extremistas hindúes para dar ejemplo a la comunidad cristiana. También sufren presión económica a través de multas injustas, detenciones prolongadas y el boicot económico, lo que empuja a las familias a la pobreza. También es frecuente que se presenten cargos falsos contra los pastores, como blasfemia o intento de convertir a los hindúes. En los últimos años, pastores y líderes han sido fichados en virtud de leyes anticonversión, lo que dificulta aún más su lucha por la justicia. Debido a las falsas acusaciones de conversión forzosa, los pastores son encarcelados durante meses, lo que deja a sus familias en una situación muy difícil.
Anjali Lhing (nombre ficticio), colaboradora de Puertas Abiertas, habla sobre la violencia en el Estado indio de Manipur.
«Las víctimas de la violencia están encontrando formas y medios para restablecerse y regresar al estado, pero los constantes ataques y los asesinatos han mermado todas las esperanzas y las oportunidades. Se queman casas, se pierden vidas inocentes y las familias siguen desplazadas. Si la situación continúa igual, se prevé otra ola de violencia generalizada»
Anjali Lhing
Los colaboradores locales de Puertas Abiertas fortalecen la Iglesia en la India proporcionando Biblias, ayuda de emergencia, capacitación para sobrevivir a la persecución, proyectos de desarrollo comunitario y de medios de subsistencia.
Señor, oramos para que guíes al nuevo gobierno de la India. Te pedimos que convenzas y empoderes a estos líderes electos para que protejan la libertad religiosa de las minorías, incluidos los cristianos. Oramos por la paz y la sanación en esta nación. Ayuda a los nuevos creyentes a soportar la presión y la violencia a la que se enfrentan por haber decidido seguir a Jesús. Por favor, permanece siempre al lado de los líderes de la Iglesia que han seguido Tu llamado para sus vidas de predicar el Evangelio y construir Tu Iglesia. Que seamos fervientes en nuestras oraciones por nuestros hermanos indios. Oramos en el nombre de Jesús. Amén.