Sepideh*, de 13 años, tiene por delante un futuro incierto.
Desde que ella y su madre decidieron seguir a Jesús en Irán, el padre de Sepideh se ha vuelto violento y abusivo.
Hace poco las echó de casa y ha pedido el divorcio.
«A veces me pregunto por qué ha cambiado mi padre. ¿Por qué ya no me quiere? ¿Sólo porque decidí amar a Jesús?»
SEPIDEH, CRISTIANA PERSEGUIDA DE 13 AÑOS EN IRÁN
La vida para la madre de Sepideh, como mujer soltera, será difícil incluso en el mejor de los casos. Pero ambas fueron bautizadas recientemente tras asistir en secreto a una conferencia cristiana en otro país, y ahora su esperanza está en Jesús.
➡️ Demuéstrales a los niños perseguidos por su fe que no están solos en la nueva campaña Solos.
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