Diez años después de la caída y muerte del coronel Muamar Gadafi, Libia no es un lugar más seguro para su población, incluida la minoría cristiana.
«El violento asesinato [de Gadafi] a manos de los rebeldes que lo capturaron cuando intentaba huir, fue una señal de lo que estaba por venir», escribe la BBC. «Las guerras alimentadas por poderes rivales dentro y fuera de Libia desgarraron la tierra y a su gente».
Su gente aún espera la paz y la libertad, dijo el analista de Puertas Abiertas, Michael Bosch. Pero las elecciones previstas para diciembre, dijo, son «una tarea casi imposible».
«A nivel nacional, hay muchos actores, incluyendo grupos armados y varias facciones dentro de los antiguos gobiernos cuya principal preocupación parece ser asegurar sus propios intereses. Pero aún más importante es la influencia de las potencias internacionales, incluidas Turquía y Rusia».
«En el fondo», dijo, «hay una lucha aún mayor que se desarrolla entre los islamistas vinculados a los Hermanos Musulmanes (apoyados por Turquía y Qatar) y los gobiernos extranjeros autoritarios (incluyendo Rusia, Egipto, los EAU y Arabia Saudí) que buscan influencia en Libia».
El pueblo libio está atrapado en medio, y para los cristianos libios de origen musulmán, el futuro sigue siendo sombrío, añadió Bosch.
«Incluso si los libios logran establecer un gobierno central, es poco probable que se proteja la libertad de religión y de creencias, a juzgar por el proyecto de constitución de 2017, que está previsto que se vote en referéndum al mismo tiempo que las elecciones de diciembre».
Hay poco espacio para la libertad religiosa en el proyecto de constitución, informó Middle East Concern (MEC). «Este documento no reconoce otras fuentes de legislación además de la sharia islámica», dijo la organización. «En la práctica, se asume que todos los libios son musulmanes, sin margen para cambiar de religión».
Los cristianos son una pequeña minoría en la Libia mayoritariamente musulmana, sólo el 0,5%. Para los conversos del islam, la presión de la familia y la comunidad para que renuncien a su fe es intensa y violenta, según Puertas Abiertas. Los cristianos expatriados de otros países africanos también son atacados por diversos grupos extremistas islámicos y grupos criminales organizados. La situación de los refugiados cristianos no es mucho mejor, ya que se han denunciado palizas y violaciones a inmigrantes retenidos en centros de detención.
Señor, te pido que Tú cambies la situación en Libia, que obres para que un gobierno pacífico se establezca y para que velen por la justicia y la libertad. Te pido por tu iglesia en Libia, para que no pierdan la fe, y que se afirmen en tu Palabra. Obra en medio de ellos poderosamente, para que sean un testimonio de que Tú eres real.