Una investigación realizada por la Asociación Internacional de Abogados y el Comité para los Derechos Humanos en Corea del Norte ha concluido que «existen motivos razonables para concluir que se han cometido, y se siguen cometiendo, crímenes contra la humanidad a gran escala» en los centros de detención norcoreanos.
El informe detalla cómo las prisiones de Corea del Norte son una extensión de una estructura política que tiene como objetivo eliminar cualquier amenaza a la dirección del país y a la ideología del Estado.
«Se encarcela sistemáticamente a miembros de la población sin el debido proceso y se les somete intencionadamente a graves sufrimientos físicos y mentales y a una severa privación de los derechos fundamentales mientras están detenidos», afirma el informe.
Los testigos dijeron a la investigación que practicar la religión es motivo suficiente para la detención y el encarcelamiento.
«Los periodos de detención son más largos para los cristianos que para otros grupos».
«Los cristianos en particular fueron objeto de detención y de un trato especialmente grave durante la misma», dice el informe. «Un detenido estimó que entre el 50 y el 60% de sus compañeros detenidos en el Centro de Detención Laboral de Corta Duración de Onsong (Jip-kyul-so) habían asistido a algún tipo de reunión cristiana en China».
«Se ha documentado que los periodos de detención son más largos para los cristianos que para otros grupos, y los testigos han informado de que "los cristianos identificados son interrogados durante periodos más largos, normalmente bajo tortura" y sometidos a algunas de las peores formas de tortura para obligarles a incriminar a otros durante el interrogatorio», descubrieron los investigadores.
«El Estado considera que la propagación del cristianismo es una amenaza especialmente grave, ya que desafía el culto a la personalidad oficial desde el punto de vista ideológico y proporciona una plataforma para la organización social y política fuera del ámbito del Estado», decía un informe de la ONU de 2014 sobre los derechos humanos en Corea del Norte.
Aunque Corea del Norte ya no está en la primera posición de la Lista Mundial de la Persecución — este año fue superado por Afganistán —, esto no significa que la situación haya mejorado.
«Con la nueva Ley de Pensamiento Antirreaccionario del año pasado, el número de cristianos detenidos y el número de iglesias domésticas cerradas aumentó, al igual que la puntuación general de la violencia», dijeron los analistas de la Unidad de Investigación World Watch.
Señor, gracias por el testimonio de tu pueblo en Corea del Norte. Te ruego que mantengas viva su esperanza, para que tu pueblo no pierda la fe. También te pido que transformes la situación de este país. Amén.