En Romanos 12:12, Pablo escribe: "gozosos en la esperanza: sufridos en la tribulación; constantes en la oración." Sin lugar a dudas, la oración es una de las necesidades más básicas del creyente, al mismo tiempo que un arma poderosa.
Sin embargo, perseverar en la oración no siempre es fácil. En ocasiones, la tribulación nos aleja de la comunión con Dios, y perdemos la esperanza en que nuestras oraciones serán atendidas. Pero podemos lograrlo: podemos mantenernos constantes
en oración.